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Autos clásicos

Porsche restaura un extraño 911 2.5 S/T 1972

Uno de los únicos 24 ejemplares destinados a la competencia es vuelto a la vida

Porsche restaura un extraño 911 2.5 S/T 1972

Antes de conocer la historia del proceso de restauración para revivir a este exótico Porsche  911 2.5 S/T 1972, conozcamos su pasado y el por qué específicamente este modelo es tan importante para Porsche.

La historia

El 911 2.5 S/T fue la variante deportiva del 911 2.4 S Coupé, desarrollado para que los clientes pudieran utilizarlo en pista y contaba con especificaciones de los Grupo 3 (vehículos de la serie GT) y Grupo 4 (vehículos GT modificados), y fue producido en muy bajas cantidades por la división de autos deportivos de la que -en aquel entonces- se llamaba Dr. Ing. h.c. F. Porsche KG. Desde finales de 1971 estuvo disponible por 49.680 marcos alemanes (unos 15.000 dólares de la época).

El hábitat de este 911 eran las carreras de resistencia como la Targa Florio y las 24 horas de Le Mans, así como las competencias de rally, para lo cual se requerían unas modificaciones adicionales que costaban 19.000 marcos más (unos 6.000 dólares) y que se regían estrictamente a las regulaciones internacionales de la disciplina en aquellos años.

El piloto estadounidense Michael ‘Mike’ Keyser compro en noviembre de 1971 uno de los 24 ejemplares del 2.5 S/T y con el disputó muchas carreras en Estados Unidos y en el campeonato mundial de resistencia durante la temporada 1972

En 1972 Jürgen Barth y Mike Keyser compitieron con el 911 2.5 S/T en las 6 Horas de Daytona y las 12 Horas de Sebring en Florida (EE.UU.), posteriormente en la Targa Florio (Italia) y los 1.000 kilómetros de Nürburgring (Alemania). Junto al suizo Sylvain Garant finalmente disputaron la carrera más importante de la temporada, las 24 Horas de Le Mans. El trío de pilotos y el 2.5 S/T no solamente ganaron la categoría GT para autos de hasta tres litros, sino que el equipo obtuvo un honroso decimotercer lugar en la clasificación general. Al finalizar la temporada el 911 fue vendido a otro piloto que lo utilizó en categorías menos importantes, hasta que debido a varios accidentes, el Porsche quedó en el olvido, y el tiempo y los elementos se encargaron de su deterioro.

El hallazgo

En 2014 un coleccionista privado de Porsche lo encontró en Estados Unidos en unas condiciones lamentables, con muchos faltantes, y con arreglos mal hechos, lo adquirió y lo envió a Porsche Classic en Alemania, para un proceso de restauración severo y absoluto, en donde se renovaría hasta la tuerca más insignificante para volver a la gloria una de las 24 piezas que se construyeron del 911 2.5 S/T.

¿Por qué es tan importante este vehículo en la historia del 911?

Cuando fue concebida la versión de competición de este auto, los ingenieros de Porsche descubrieron su amplio potencial, y en cuanto terminaron los 24 ejemplares del 911 2.5 S/T empezaron un nuevo proyecto llamado 911 Carrera 2.8 RSR, un  vehículo pensado y concebido desde el inicio como un auto de competencia, de hecho las siglas RSR significan –en alemán- RennSport Rennwagen, y que podemos traducir literalmente como un auto de carrera, que siguiendo la filosofía de Ferry Porsche, que todos los desarrollos exitosos de las carreras tendrían que verse reflejados en el desempeño de los Porsche de serie.

El proceso de restauración del histórico ejemplar.

En cuanto el vehículo llegó a Alemania lo primero que hicieron los restauradores de Porsche Classic fue seleccionar todas las piezas que venían sueltas en el interior del auto, y desarmarlo en su totalidad, para poder evaluar el nivel de daño estructural que presentaba tras años a la intemperie. La carrocería estaba muy oxidada, no tenía puertas, y el techo aparentemente había sido el terreno de juego de unos niños que saltaron sobre el hasta dejarlo completamente inservible. Con el esqueleto de la carrocería desnudo y limpio, se procedió a hacer a mano todas las piezas faltantes, siguiendo rigurosamente las especificaciones de 1972. Ya con todas las piezas nuevas la carrocería, el 911 recibió un tratamiento anti corrosión por inmersión catódica y después se procedió a pintarlo del color original, un amarillo claro código 117 y se decoró con los patrocinadores y patrones de diseño de la época en la cual Michael Keyser compitió con el.

El Director de Porsche Classic Alexander Fabig cuenta que ha sido uno de los trabajos de restauración más intensos e importantes que ha llevado el Depto. de Clásicos de la marca, ya que el grado histórico de la pieza hacía que fuese un reto interesante, y como solamente se construyeron 24 ejemplares en su época, había información limitada, de hecho algunas piezas tuvieron que fabricarse artesanalmente usando las fotos de época para replicarlas lo más parecido a las originales.

El trabajo terminado puede verse en el stand de Porsche Classic en el marco de Techno Classica, en Essen Alemania, que dicho sea de paso es la feria de autos clásicos más importante de Europa, y que se celebra en el mes de abril.

Disfruta la galería en donde además de poder ser testigo del largo proceso de restauración, podrás ver fotos de la época en donde el 911 2.5 S/T brilló en las pistas.

 

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